El presidente estadounidense Donald Trump está tratando de contrarrestar la influencia de Teherán en la región.
Soldados de EEUU en Irak. El secretario de Estado Mike Pompeo prometió este viernes a Irán una "respuesta decisiva" si los intereses de Estados Unidos en Irak resultan afectados, tras una serie de ataques con cohetes.
"Debemos usar esta oportunidad para recordar a los líderes de Irán que cualquier ataque de su parte o de parte de sus aliados de cualquier tipo, que afecte a estadunidenses, a nuestros aliados o nuestros intereses será objeto de una respuesta decisiva", dijo Pompeo en un comunicado.
"Irán debe respetar la soberanía de sus vecinos y cesar inmediatamente su provisión de apoyo y ayuda letal a terceros en Irak y en toda la región", añadió. Washington ha expresado su creciente preocupación por la oleada de ataques contra bases iraquíes utilizadas por tropas estadounidenses, varios de los cuales ha atribuido a grupos paramilitares chiítas respaldados por Irán.
Dos ataques con cohetes esta semana tuvieron como objetivo un complejo cerca del Aeropuerto Internacional de Bagdad, que alberga soldados estadounidenses, con un incidente el miércoles que hirió a militares iraquíes.
Pompeo atribuyó la culpa de los últimos ataques directamente a "allegados de Irán". Irán ha adquirido una influencia abrumadora en Irak, su vecino con el que comparte una mayoría chiíta, desde la invasión estadounidense de 2003 que derribó a Saddam Hussein.
La administración del presidente Donald Trump, que está cerca de los adversarios de Irán Arabia Saudita e Israel, ha estado tratando de contrarrestar la influencia de Teherán en la región, incluso a través de sanciones destinadas a bloquear todas sus exportaciones de petróleo.