Rusia potencia sus posiciones en la cooperación técnico-militar con la India – dicen los expertos en relación a la entrega por Moscú en arriendo del submarino atómico K-152 Nerpa. La ceremonia de entrega tuvo lugar cerca de Vladivostok. El contrato reviste gran importancia para la India, dado que sus principales rivales en la región por ahora no tienen submarinos atómicos.
Durante la ceremonia en el sumergible fue izada la bandera de la India. Bajo ese pabellón el submarino zarpará hacia su base. Rusia arrienda el K-152 a la India por diez años. El costo del acuerdo supera los novecientos millones de dólares. Al buque se le ha dado el nuevo nombre de "Chakra", en honor del primer submarino entregado por la Unión Soviética a la India en 1988. El actual acuerdo demuestra que Moscú es un socio seguro de Nueva Delhi en el área de la cooperación técnico-militar. Y todo lo que se dice de que ha perdido sus posiciones en la región es inconsistente –estima el redactor responsable de Nezavísimoe Voennoe Obozrenie Víctor Litovkin:
–Todo esto es un disparate, porque Rusia hoy coopera con la India por un monto superior a los diez mil millones de dólares. Se trata además de la modernización de un portaaviones para la India y del suministro a ese país de cazas navales Mig-29K. Ya compraron dieciseis unidades y se aprestan a adquirir otras dieciseis. La India nos ha comprado más de trescientos tanques T-90 y tiene planeado adquirir otros mil quinientos, así como fabricar esos tanques en su territorio. La India con nosotros fabrica el avión de quinta generación. Además, cabe destacar la creación del misil supersónico antibuque BraMos.
A propósito, el proyecto BraMos, nombre derivado de los ríos Brahmaputra y Moscova, ya ha sido reconocido por los expertos como ejemplo único de producción conjunta. Otra prioridad de la India es la ampliación del pool de socios. Semejante enfoque es acogido erróneamente como desplazamiento de Moscú del mercado local de armamentos –dijo a La Voz de Rusia el experto del Centro Carnegie en Moscú, Piotr Topichkanov:
–La posición de Rusia experimenta cambios objetivos en ese mercado. Esto se debe a que la India ha optado por la política de diversificación de los proveedores. El segundo aspecto es que la India prefiere ahora crear conjuntamente tecnologías y modelos de maquinaria militar en su territorio. Por eso objetivamente no pueden depender de la producción del complejo militar-industrial ruso. Por eso mismo Francia, Italia y EEUU intentan afianzarse en algunas esferas. No se trata de ninguna rivalidad, simplemente nos complementamos. Ya se han dado ejemplos de que para recibir un buque o un avión necesitó incorporar a diferentes países para dotar a esa nave de los estándares locales. Es un proceso totalmente normal.
El submarino "Chakra" es una nave de tercera generación. Componen sus armamentos misiles, torpedos y misiles-torpedo. Antes los países vecinos de la India manifestaban su preocupación alegando que el submarino atómico provocará la carrera armamentista. Y en consonancia con las demandas del régimen de no proliferación del submarino se quitaron los misiles de largo alcance –apunta Piotr Topichkanov:
–Esto no viola de ningún modo el régimen de no proliferación. Y nosotros no influimos en la elevación del nivel de las fuerzas nucleares de la India, que en su mayor parte están concentradas en los misiles lanzadores con base en tierra firme. Lo más probable es que el arriendo del submarino tenga para la India funciones experimentales. Ese país se dedica ahora al diseño de su propio submarino, estudia cómo funciona tal o cual equipo. Desde luego que esto preocupa a Pakistán y China. En su lugar no me asustaría. Esto no significa que la India se ha convertido en una potencia nuclear marítima, esto es cuestión del futuro.
Tras su entrega, la tripulación del submarino Chakra estará compuesta totalmente por marinos indios. Dicho sea de paso, ellos realizaron prácticas en Rusia a lo largo de casi dos años. Cabe añadir que China ya ha diseñado un submarino con reactor nuclear, aunque por ahora es una nave experimental.
Durante la ceremonia en el sumergible fue izada la bandera de la India. Bajo ese pabellón el submarino zarpará hacia su base. Rusia arrienda el K-152 a la India por diez años. El costo del acuerdo supera los novecientos millones de dólares. Al buque se le ha dado el nuevo nombre de "Chakra", en honor del primer submarino entregado por la Unión Soviética a la India en 1988. El actual acuerdo demuestra que Moscú es un socio seguro de Nueva Delhi en el área de la cooperación técnico-militar. Y todo lo que se dice de que ha perdido sus posiciones en la región es inconsistente –estima el redactor responsable de Nezavísimoe Voennoe Obozrenie Víctor Litovkin:
–Todo esto es un disparate, porque Rusia hoy coopera con la India por un monto superior a los diez mil millones de dólares. Se trata además de la modernización de un portaaviones para la India y del suministro a ese país de cazas navales Mig-29K. Ya compraron dieciseis unidades y se aprestan a adquirir otras dieciseis. La India nos ha comprado más de trescientos tanques T-90 y tiene planeado adquirir otros mil quinientos, así como fabricar esos tanques en su territorio. La India con nosotros fabrica el avión de quinta generación. Además, cabe destacar la creación del misil supersónico antibuque BraMos.
A propósito, el proyecto BraMos, nombre derivado de los ríos Brahmaputra y Moscova, ya ha sido reconocido por los expertos como ejemplo único de producción conjunta. Otra prioridad de la India es la ampliación del pool de socios. Semejante enfoque es acogido erróneamente como desplazamiento de Moscú del mercado local de armamentos –dijo a La Voz de Rusia el experto del Centro Carnegie en Moscú, Piotr Topichkanov:
–La posición de Rusia experimenta cambios objetivos en ese mercado. Esto se debe a que la India ha optado por la política de diversificación de los proveedores. El segundo aspecto es que la India prefiere ahora crear conjuntamente tecnologías y modelos de maquinaria militar en su territorio. Por eso objetivamente no pueden depender de la producción del complejo militar-industrial ruso. Por eso mismo Francia, Italia y EEUU intentan afianzarse en algunas esferas. No se trata de ninguna rivalidad, simplemente nos complementamos. Ya se han dado ejemplos de que para recibir un buque o un avión necesitó incorporar a diferentes países para dotar a esa nave de los estándares locales. Es un proceso totalmente normal.
El submarino "Chakra" es una nave de tercera generación. Componen sus armamentos misiles, torpedos y misiles-torpedo. Antes los países vecinos de la India manifestaban su preocupación alegando que el submarino atómico provocará la carrera armamentista. Y en consonancia con las demandas del régimen de no proliferación del submarino se quitaron los misiles de largo alcance –apunta Piotr Topichkanov:
–Esto no viola de ningún modo el régimen de no proliferación. Y nosotros no influimos en la elevación del nivel de las fuerzas nucleares de la India, que en su mayor parte están concentradas en los misiles lanzadores con base en tierra firme. Lo más probable es que el arriendo del submarino tenga para la India funciones experimentales. Ese país se dedica ahora al diseño de su propio submarino, estudia cómo funciona tal o cual equipo. Desde luego que esto preocupa a Pakistán y China. En su lugar no me asustaría. Esto no significa que la India se ha convertido en una potencia nuclear marítima, esto es cuestión del futuro.
Tras su entrega, la tripulación del submarino Chakra estará compuesta totalmente por marinos indios. Dicho sea de paso, ellos realizaron prácticas en Rusia a lo largo de casi dos años. Cabe añadir que China ya ha diseñado un submarino con reactor nuclear, aunque por ahora es una nave experimental.
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