El presidente ruso, Dimitri Medvedev.
El presidente ruso, Dmitry Medvedev, reiteró que el análisis de los temas más urgentes sobre la seguridad regional tendrá una prioridad especial en sus conversaciones con el presidente Bashar Al-Assad durante su visita a Siria.
Medvedev, en un artículo publicado por el diario Al Watan, consideró que es el deber de Rusia y Siria coordinar con otros países interesados en desplegar incansables esfuerzos para promover la transición hacia la paz y la estabilidad en el Oriente Medio.
El presidente de Rusia manifestó su alegría por ser el primer mandatario ruso que visita Siria, subrayando que no puede ignorar los asuntos regionales e internacionales durante su visita a Damasco, calificándolo como uno de los más importantes centros políticos en el Oriente Medio.
Además, Medvedev, dijo que la misión de establecer un nuevo orden mundial justo y estable encabeza la agenda de trabajo de la comunidad internacional, especialmente en un mundo donde se impone la multipolaridad cada vez más en todos los niveles y salta a primer plano la necesidad de una búsqueda colectiva de métodos para afrontar los retos.
Medvedev vio que además de las fluctuaciones financieras y económicas, los conflictos regionales y locales, el terrorismo, la delincuencia transnacional y los desafíos alimentarios y climáticos constituyen una amenaza al desarrollo global, manifestando su convicción de que Rusia y Siria tienen un amplio margen para hacer frente a este escenario.
El presidente ruso hizo hincapié en la predisposición de su país de cooperar extensamente en el uso de la tecnología avanzada para desarrollar las relaciones comerciales y económicas, especialmente en los proyectos conjuntos en comunicación y tecnología informática señalando que analizará todas estas cuestiones durante sus conversaciones con el presidente Al-Assad.
Medvedev, en un artículo publicado por el diario Al Watan, consideró que es el deber de Rusia y Siria coordinar con otros países interesados en desplegar incansables esfuerzos para promover la transición hacia la paz y la estabilidad en el Oriente Medio.
El presidente de Rusia manifestó su alegría por ser el primer mandatario ruso que visita Siria, subrayando que no puede ignorar los asuntos regionales e internacionales durante su visita a Damasco, calificándolo como uno de los más importantes centros políticos en el Oriente Medio.
Además, Medvedev, dijo que la misión de establecer un nuevo orden mundial justo y estable encabeza la agenda de trabajo de la comunidad internacional, especialmente en un mundo donde se impone la multipolaridad cada vez más en todos los niveles y salta a primer plano la necesidad de una búsqueda colectiva de métodos para afrontar los retos.
Medvedev vio que además de las fluctuaciones financieras y económicas, los conflictos regionales y locales, el terrorismo, la delincuencia transnacional y los desafíos alimentarios y climáticos constituyen una amenaza al desarrollo global, manifestando su convicción de que Rusia y Siria tienen un amplio margen para hacer frente a este escenario.
El presidente ruso hizo hincapié en la predisposición de su país de cooperar extensamente en el uso de la tecnología avanzada para desarrollar las relaciones comerciales y económicas, especialmente en los proyectos conjuntos en comunicación y tecnología informática señalando que analizará todas estas cuestiones durante sus conversaciones con el presidente Al-Assad.
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