Otra traducción al árabe fue el texto del Segundo Plan Quinquenal, 1951-1955, que es una de las mayores curiosidades de la Biblioteca del Congreso de la Nación que cumple 150 años.
La explicación de estas traducciones hay que buscarlas en la posición política de Perón. En el campo de las relaciones internacionales, el general abogó siempre por esa tercera posición equidistante entre el comunismo soviético y el capitalismo estadounidense, lo que lo llevó a apoyar al Movimiento de Países No Alineados y buscar puntos de contacto con el mundo árabo-islámico.
Al triunfar la Revolución Nacionalista en Irán en abril de 1951 y en Egipto en julio de 1952, Perón estrechó profundos lazos tanto con el gobierno del primer ministro iraní Muhammad Mosaddeq como con el del presidente egipcio Gamal Abdel Nasser.
Durante los sesenta del pasado siglo era común escuchar en las manifestaciones de trabajadores y estudiantes que se sucedían en las calles argentinas lemas como “Nasser = Perón Tercera Posición” que eran el resultado de aquellas convergencias forjadas en la década anterior.