El Banco Central de Argelia.
Argelia decidió no recurrir a créditos externos, una medida que libera al país de las intervenciones de instituciones como el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Después de haber reducido a fines del año pasado, el volumen de la deuda externa a un nivel insignificante, menos de 600 millones de dólares, las autoridades estiman que el contexto actual se presta a continuar a gestionar las grandes obras de infraestructuras y otros proyectos socioeconómicos sin ser inquietados por ningún pago de deudas.
Argelia no necesitaría más al FMI para recibir préstamos con condiciones como ocurría antes.
El gobernador del Banco Central argelino reveló que actualmente el servicio de la deuda representa solo el 1% del Producto Bruto Interno (PBI), cuando representaba el 58% en 1991.
Después de haber reducido a fines del año pasado, el volumen de la deuda externa a un nivel insignificante, menos de 600 millones de dólares, las autoridades estiman que el contexto actual se presta a continuar a gestionar las grandes obras de infraestructuras y otros proyectos socioeconómicos sin ser inquietados por ningún pago de deudas.
Argelia no necesitaría más al FMI para recibir préstamos con condiciones como ocurría antes.
El gobernador del Banco Central argelino reveló que actualmente el servicio de la deuda representa solo el 1% del Producto Bruto Interno (PBI), cuando representaba el 58% en 1991.
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